El Chelsea remontó al Real Madrid Femenino para llevarse la victoria 1-2 en el Di Stéfano y de paso el liderato del Grupo B en la Women´s Champions League
El Real Madrid femenino rozó una noche histórica ante el Chelsea, pero dos penaltis en contra, ambos provocados por Olga Carmona en apenas cuatro minutos, terminaron echando por tierra el sueño. Catarina Macario no perdonó desde los once metros y el partido acabó 1-2. Las de Alberto Toril, que ya estaban clasificadas a cuartos, buscaban terminar primeras del grupo, pero lo harán como segundas, por detrás de un Chelsea que ganó los seis partidos.
Y eso que el Madrid lo tuvo ahí. A los seis minutos, Caroline Weir adelantó al equipo con un remate que se coló tras un mal despeje de la portera. Era un arranque perfecto, que ilusionaba con una posible primera victoria frente al Chelsea en la historia del club. No pudo ser. A pesar de algunos buenos tramos de juego y un planteamiento serio, el inicio de la segunda parte fue un mazazo.
Toril recuperaba a Lakrar en el once, mientras que el Chelsea llegaba sin Sam Kerr, Kaneryd ni Lauren James. En la ida se había perdido por 3-2, y en el Di Stéfano la idea era clara: ganar y acabar primeras.
El equipo salió enchufado. Weir avisó con un disparo lejano antes del gol, y Misa sostuvo el 1-0 con varias buenas paradas en la primera mitad. Olga rozó el segundo en el 24’ con un tiro al palo largo, pero el balón se fue fuera por poco. El equipo estaba vivo, compitiendo bien.
Pero todo cambió en el segundo tiempo. Macario entró, y el partido giró. Penalti en el 50’ por un pisotón de Olga. Gol. En el 54’, otro penalti por mano de la misma jugadora. Gol. En apenas cuatro minutos, remontada del Chelsea.
El Madrid lo intentó hasta el final. Hampton evitó el empate con una mano salvadora, y Feller tuvo el 2-2 en sus botas pero definió fatal. También Weir probó suerte desde fuera del área. El equipo compitió, dejó buenas sensaciones, y aunque queda el sabor amargo de la derrota, la sensación es que están más cerca que nunca de pelear de tú a tú con los grandes de Europa.